La voz del pueblo incomoda a Morena

El PRI Nacional asegura que la ciudadanía reconoce los vínculos de Morena con la delincuencia y rechaza la persecución política contra el presidente tricolor, Alejandro Moreno Cárdenas.

Desde el Comité Ejecutivo Nacional del PRI se advierte que el sentir ciudadano frente a la situación política del país es claro: Morena no ha logrado desvincularse de las acusaciones por presuntos lazos con la delincuencia organizada, y sus acciones contra Alejandro Moreno Cárdenas son vistas como una persecución política más que como un acto de justicia.

De acuerdo con dirigentes priistas, en plazas públicas, foros y redes sociales se repite un mismo reclamo: el oficialismo utiliza su mayoría legislativa y el control de instituciones para acallar a quienes se atreven a denunciar irregularidades y vínculos criminales. En este contexto, la figura de Alejandro Moreno se ha convertido en un símbolo de resistencia frente a lo que el PRI describe como un régimen autoritario que protege a sus aliados y hostiga a sus críticos.

El partido subraya que las acusaciones contra Morena no surgen únicamente de líderes opositores, sino de voces ciudadanas que, en distintas regiones del país, han vivido de primera mano el avance del crimen organizado bajo gobiernos morenistas. Para la dirigencia tricolor, esta percepción popular refuerza la legitimidad de su lucha política y jurídica contra el actual modelo de gobierno.

El respaldo popular que el PRI asegura recibir en torno a Alejandro Moreno no solo fortalece su narrativa de persecución política, sino que expone un desgaste creciente en la imagen de Morena. En medio de un clima de inseguridad y desconfianza, la confrontación entre ambos bandos deja claro que el pulso político de México se juega tanto en las instituciones como en la calle, donde la opinión del pueblo comienza a tener un peso que incomoda al poder.